RÜDIGER DORN

Hoy en la sección de autores de juegos de mesa, hablaremos de Rüdiger Dorn. Famoso autor alemán (otro más...) nacido en 1969, que además de diseñar juegos, se dedica a la enseñanza. En sus vitrinas está un Kennerspiel des Jahres de 2014 por su juego Istanbul. Y tiene varias nominaciones en los Spiel. 

Autor que en mi casa está maldito, porque he probado varios de sus juegos, pero ninguno a día de hoy se mantiene en mi ludoteca. Y no es un mal diseñador, ni mucho menos, pero para mi gusto hace juegos demasiado familiares. Es un autor bastante prolífico, así que vamos a intentar analizar un poquito lo que ha dado de sí toda su carrera, y lo que dará.

Cosas que caracterizan a Rúdiger Dorn como autor de juegos de mesa:

- Juegos ligeros: Como ya mencionaba en la introducción, no se caracteriza por diseñar juegos demasiado duros. De hecho, se dirige a un público infantil o familiar. Buenos ejemplos de ello son su juego Karuba, un juego de losetas de ir completando caminos, que bien se puede jugar con peques, y un ejemplo de eurogame ligero podría ser su Luxor (reseña), que viene a ser una Oca vitaminada, que se deja jugar muy bien, y se le puede sacar a cualquiera. Y digo lo de Oca, porque al final se trata de un recorrido helicoidal que nos lleva a intentar ganar una carrera por ser el primero en llegar al centro del tablero, y mientras por el camino haber recogido tesoros suficientes.

- Juegos muy bien terminados: Todos los juegos que le conozco están muy bien cerrados. No tienen fisuras, se ve que los han testeado el tiempo necesario. Vease su juego GOA, un clásico de subastas, con una mecánica mas que curiosa, que se mantiene en forma y funciona como un reloj suizo. Es quizá el juego que más se aleja de lo habitual de Rüdiger, porque es más complejo que la mayoría de sus diseños, y podría considerarse un clásico, pero para mi no lo es.

En mi opinión nunca ha llegado a la excelencia con uno de sus juegos, a excepción del Istanbul, y discrepo, pero no creo que sea por un factor diseño, si no más por sensaciones que pueda transmitir a los jugadores. Es decir, el factor diversión, que desgranaremos en otro párrafo. En general sus juegos son de notable.

- Versatilidad: El bueno de Rüdiger es como una navaja suiza. Se ha atrevido con un montón de mecánicas distintas. Subastas, pick & deliver, losetas, desarrollo de cartas... Por mencionar uno, con el que se ha consagrado como autor, diría de nuevo Istanbul (reseña), que es un referente en cuanto a la mecánica de pick & deliver. A mi en particular es una mecánica que no es muy de mi agrado, porque me resulta repetitiva, de hecho en este juego, puedes llegar a ganar la partida repitiendo varias veces la misma jugada, y es lo que a mi me hizo deshacerme de él.  

- Diversión/sensaciones Meh: Rüdiger me parece un gran autor de juegos de mesa, como he dicho, por mis manos han pasado al menos 4 de sus juegos. Así que puedo hablar por experiencia, y lo único que le reprocho, es que sus juegos se me acaban por hacer un poco planos. Son entretenidos, pero no te generan ganas de volver a jugarlos. Por poner un ejemplo de esto, quería hablar de Jambo, o su reimplementación Asante (reseña). Es un juego de desarrollo de cartas y puntos de acción, que se deja jugar, pero no genera partidas para el recuerdo ni momentos épicos. Tampoco me generó nunca ganas de revancha. Quizá éste sea su punto más importante a mejorar.

- Le gusta el azar: Es un autor que no le hace ascos para nada al azar. El mayor ejemplo de esto, es su juego Las Vegas o su versión posterior Las Vegas Royale (reseña). Un tira dados de toda la vida, sin otra pretensión que sembrar interacción entre los jugadores por todos los costados. En este casi filler, haremos tiradas de dados para intentar conseguir la mayoría en ciertos casinos, y llevarnos el botín más grande de cada uno de ellos. Buen juego para no jugones.

Hasta aquí la disección quirúrgica que hemos hecho al bueno de Rüdiger. A mi me parece un gran autor de juegos de mesa, pero a mi en concreto se me quedan cortos. Entiendo que para un público menos jugón o iniciado, cualquier juego de Dorn puede ser una buena puerta de entrada. Pero en mi humilde opinión hay otros autores alemanes que están por encima de él. Y como digo, no tiene malos diseños, pero para mi le falta todavía sacar un juego remarcable que llegue a la categoría de gran clásico. Quizá nos sorprenda pronto...

Seguiremos dando información lúdica mientras nos queden ganas!!

Hasta otra!!